Una despensa de 3.640 kilómetros cuadrados, rodeada de
mediterráneo y bañada por el sol.
Mallorca es el lugar que lo ofrece todo para que la experiencia Arrels tenga sentido. Porque Arrels, en mallorquín, significa raíces, y es precisamente en las más profundas raíces de esta isla donde se sustenta toda la esencia de un restaurante distinto a todos los demás.
Un proceso natural que en Arrels respetamos profundamente como la
base de nuestra cocina, los productos de temporada.
Lo mejor de cada día acabará formando parte del menú de Arrels. Porque así es cómo se decide nuestra carta, escogiendo la mejor materia prima que el día nos ofrece.
Muchos de los productos seleccionados son autóctonos y tienen su raíz en Mallorca, otros no, porque para enriquecer el menú diario de Arrels, lo más importante no es la procedencia sino la excelencia, y existen productos excelentes que provienen de otros lugares y llegan frescos a los distintos mercados de la isla.
En nuestra bodega contamos con los mejores vinos tintos, blancos y rosados tanto de Mallorca y el resto de islas como de las mejores denominaciones de origen del país. Siempre hay un vino para acompañar un buen plato y en Arrels te ofrecemos una extensa selección para un maridaje perfecto.
Teniendo siempre presente el respeto por la tradición y las raíces, por el sabor y la riqueza gastronómica de siglos, por la sabiduría culinaria de aquellos que nos precedieron, creamos cada día algo muy propio, muy especial y muy nuestro. Las texturas, los sabores y los colores que nos diferencian y nos hacen estar siempre en contacto con la cocina real.
Marga Coll elige personalmente los mejores productos que más tarde cocinará, transformando una materia prima fresca y de calidad en exquisitos platos. En Arrels, es el Mercado el que marca el menú de cada día.
Siempre he creído que el destino tenía preparado para mi precisamente esto, disfrutar de la cocina y del placer de sentir que, aquello que hago cada día, gusta a quien lo prueba.
Desde que era solo una niña, recuerdo el interés, la pasión y la curiosidad que despertaban en mi los platos típicos de la cocina mallorquina que se guisaban en casa.
Tanto en la Escuela de Hostelería, como en los distintos restaurantes en los que he tenido la suerte de poder desarrollar y perfeccionar mi vocación, tenía claro que mi objetivo era construir un mundo culinario propio, por eso, en 2012, inauguramos Miceli, y por eso, desde 2016, dirijo la oferta gastronómica de Arrels.
Desde el principio, su propósito ha sido recuperar, reinventar y reivindicar una cocina rica en sabor y variedad, pero siempre desde el más profundo respeto, poniendo en valor una categoría gastronómica indiscutible.
Un desayuno diferente, único en la isla. Una experiencia gustativa y sensorial de más de dos horas de duración, un exquisito recorrido de cinco etapas por la gastronomía balear.
La noche, las increíbles vistas al mar mediterráneo, la sugerente iluminación de los delicados jardines y los mejores ingredientes seleccionados a diario, dan siempre como resultado una velada mágica de colores, texturas y sabores incomparables.
El mar, el lujo, el servicio y la elegancia íntima y discreta de un espacio pensado solo para adultos, diferencian al Hotel de Mar, a Gran Meliá Hotel y lo convierten en la ubicación perfecta para disfrutar de una experiencia gastronómica única.
Diseñado por el reconocido arquitecto José Antonio Coderch, el Hotel de Mar, a Gran Meliá Hotel es mucho más que un hotel de 5 estrellas.
Por ubicación y servicios, se sitúa como uno de los hoteles más importantes de la isla. Es el perfecto ejemplo de la apuesta por el lujo contemporáneo de la marca más exclusiva de Meliá Hotels International.